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UN
ENCUENTRO CON LA PALABRA
Génesis 7:1-3 La Biblia de las Américas
Noé
entra en el arca
7 Entonces el Señor dijo a Noé: Entra en el arca tú y todos los de
tu casa[a]; porque he visto que solo tú eres justo delante
de mí en esta generación. 2 De todo animal limpio tomarás
contigo[b] siete parejas[c], el macho y su hembra; y de todo
animal que no es limpio, dos, el macho y su hembra; 3 también de las aves del cielo,
siete parejas[d], macho y hembra, para conservar viva
la especie[e] sobre la faz de toda la tierra. 4 Porque dentro de siete días haré
llover sobre la tierra cuarenta días y cuarenta noches, y borraré de la
faz de la tierra a todo ser viviente[f] que he creado[g]. 5 Y Noé hizo conforme a todo lo que el Señor le había mandado.
UN
ENCUENTRO CON LA PALABRA
REFLEXION
¿Ya sacó tu cabeza?
Reflexiones cristianas diarias por
CVCLAVOZ
Mucha gente vive esperando ser libre
de algo, pero solamente Dios puede sacar nuestras cabezas y darnos la libertad
que necesitamos.
Así que, si el Hijo los hace libres,
ustedes son verdaderamente libres.
Juan 8:36 (NTV).
Esclavos libertados
Se cuenta que un misionero que estaba
traduciendo la Biblia a la lengua
bambara, en el África occidental, le preguntó a su ayudante la forma de traducir
la palabra “redimir”
Decimos: Dios sacó nuestra cabeza.
¿En qué forma puede ayudar esto a la
gente a comprender lo que es la redención? – respondió el misionero.
Mucho, pues la idea se haya
profundamente incrustada en los
recuerdos de nuestros padres- respondió el nativo.
El ayudante del misionero procedió a
contarle que en el pasado, algunos miembros de la tribu eran encadenados, junto
con otros capturados, con un fuerte collar de cuero alrededor del cuello.
Cuando dichos esclavos pasaban por los
pueblos, algún jefe podía ver a un amigo entre los capturados y quería darle la
libertad. Para conseguirlo tenía que pagar a los traficantes una suma
específica de oro, plata, cobre o marfil.
Cuando se entregaba lo requerido, al
esclavo rescatado le sacaban entonces la cabeza del collar de cuero que le
ataba a sus compañeros. Su redentor había sacado su cabeza.
Un precio muy alto
No importa qué es lo que te tiene
prisionero, si se trata de una adicción, de la depresión, la culpa o quizás
alguna otra cosa, Dios ya pagó un alto precio por tu libertad, pero tú tienes
que querer sacar la cabeza de ese collar que te mantiene atrapado.
Porque de tal manera amó Dios al
mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no
se pierda, mas tenga vida eterna.
Juan 3:16 (RVR1960).
Dios te ama tanto que dio la vida de
su Hijo para que puedas ser libre de cualquier prisión, de cualquier
esclavitud.
Es tiempo de permitir que Dios saque
tu cabeza, no sigas luchando por tus propias fuerzas y acepta el regalo que Él
te da.
Ana María Frege Issa
CVCLAVOZ
